Hoy andamos con poca ilusión y con esa sensación extraña y frecuentemente ambigua. Es una mezcla entre desilusión, abatimiento, decepción, tristeza, pena y... lo de siempre, sentir que lo que quiero parece que no es para mi. Realmente me siento derrotada una vez más... es lo que tiene meterse en guerras que no son mias, al final sales con el rabo entre las piernas y con cara de boba y pienso... con la de tiempo y recursos que has invertido y al final... nada, todo ha quedado en nada. Bueno no creo que haya sido así del todo, pero si que al final el resultado no la sido el esperado... que aunque comienzo las cosas sin esperar nada al final si te queda esa cosilla de que te podían haber recompensado de alguna manera, y seguramente me hayan recompensado pero no como yo hubiese querido. Se me pasará, seguro que se me pasará.
Pero de nuevo me quedo con el sentimiento de que otra vez me he vuelto a equivocar en mi forma de proceder, y de que así, nunca voy a hacerme valer en la forma en que yo quiero.
Sí claro, todo el mundo me quiere. Soy la amiga perfecta, la compañía perfecta, la gestora perfecta pero... soy la mujer perfecta????
Evidentemente NO. Pues tengo un par de opciones que se me pasan por la cabeza... o intento cambiar en mi manera de actuación y de moverme entre la gente o me resigno y me dedico a ser amiga del mundo de por vida.
Bueno, también puedo recluirme de nuevo y así evito tener estas sensaciones, total al final voy a conseguir lo mismo, no?
Que fácil es transmitir alegría cuando las cosas salen como una quiere o cuando cree que están saliendo como sueña. En cambio cuando el horizonte se avecina diferente al creado en la imaginación que duro se hace dar un solo paso.
Son sentimientos que se repiten desde niña... ya los conozco y tengo la sensación de que aunque aparentemente he avanzado mucho, al final siento lo mismo que hace 40 años. Que desesperación, no?
Dan ganas de tirar la toalla y de desaparecer del mundo.
Pero bueno, no puedo culpar a nadie más que a mi misma de hacer las cosas equivocadamente y pensar o creer cosas que son sólo producto de mi imaginación, pero... que bonito si se hubiesen dado, verdad?
Pues nada, dejaremos de soñar en eso... ahora a pasar mi miniduelo personal e intrasferible y a volver a empezar de nuevo.
Quizá algún día consiga aprender a ser perfecta o al menos a ser lo perfecta que me gustaría ser para que las cosas se diesen algo mejor en mi vida.
Como dije en alguna ocasión... me voy, pero regreso, pronto regreso!!!!
