viernes, 11 de octubre de 2013

Insensible?

Pasan los años y aquello que antes dolía, ahora me roba energía...  cada vez en menor medida, pero roba.

Precisa de un esfuerzo por mi parte apartar lo que no quiero en mi vida, por tanto, tiempo, mente, cuerpo, sueño... hasta que desaparezca.

Antes mi esfuerzo se volcaba en intentar convencer o cambiar a los demás. Ahora soy fría, no me esfuerzo en acercar a quien no quiere, en convencer a quién no cumple, no malgasto mi tiempo en nada.

Ahora me cuido, me centro en apartar a aquello o aquellos que no me cuidan, ni respetan, ni valoran, ni se esfuerzan.

Viven cómodos sin reparar en el compromiso, en la calidad humana, en el tiempo que regalas sólo por sacar una sonrisa o momento de felicidad.

Y miento si digo que no se espera nada a cambio, quizá de la mayoría no, pero de los cercanos lo que no esperas es que te dejen colgado, o descubras que simplemente van a lo suyo y que quizá se pegasen a tí por interés y no por el cariño que pensabas existía.

Y te vas dando cuenta el desapego que se va dando, la insensibilidad que vas adquiriendo...

Y es curioso como el resto se sorprende cuando ya no insistes, ni peleas... porque esperan que lo hagas como tantas veces lo has hecho.

Y se enredan en discursos, en creer que te molestas, que te enfadas...

Si tu eres importante, yo lo soy mucho más para mi mismo.

Desilusión? No. Simplemente, se acabó el hacer las cosas para los demás, sólo eso.

Comienza el hacer para uno mismo, porque es difícil... iba a decir defraudarse a sí mismo, pero no sería cierto.

Tantas veces me he enfadado conmigo misma, tantas veces me he desilusionado y defraudado.

Y sé que no debo pensar así de mí, no debo fustigarme ni juzgarme de esa manera, porque haya hecho lo que haya hecho, pensado lo que haya pensado, actuado como haya actuado, siempre fué creyendo que era lo que debía hacer en ese momento.

Y quizá parezca que me vuelvo insesible, de hecho creo que es cierto.

Cuando siento esa frialdad en mí, ante hechos que antes me dolían, reconozco que en principio me asusta, no me reconozco, pero según se van sudeciendo circunstancias similares y siento frío me acostumbro a que es así y seguramente deba ser así.

Hoy me levanté revuelta, incómoda, como si fuese a suceder algo desagradable, como si de nuevo algo atacase mi paz.

Me canso de luchar y de querer que todo sea perfecto, o de rodearme de circunstancias que no me apetecen.

Quiero limpiar tanto que me agoto y me quedo sin fuerzas.

Porque limpio para liberarme de todo lo que roba mi energía, pero a la vez me agota.

Y cuando se ha acumulado tanto, limpiar en profundidad es un enorme trabajo que me empieza a cansar demasiado.

Y cuando ves tanta mierda cerca, puffff, que cansado es todo.

Y lo dejo aquí, porque mi insensibilidad se está convirtiendo en cansancio y en estos momentos preferiría que predominase lo primero.

Me insensibilizo, me aburro, me canso...

1 comentario:

  1. No dejes que nadie te robe energia y haz lo que quieras en todo momento para ser feliz.

    ResponderEliminar