miércoles, 11 de diciembre de 2013

Buscando lo necesario

Vuelvo a replantearme mi situación.

Por un lado me siento dichosa y feliz. Por otro veo que dejo de vivir y sonreir como antes.

Hace mucho que no me carcajeo y no sé aún si es lo que debe ser o no.

Me atacan las responsabilidades por todos los flancos. Responsabilidades, casi todas, a las que quiero hacer frente.

Pero tampoco me atraen las posibilidades de ocio que se me ponen delante. Me parecen aburridas, lo de siempre, que no me aportan nada.

Es como si hubiese llegado a un momento en lo que nada me atrae. Me siento inapetente.

Tampoco sé por dónde empezar a cambiar o si debo cambiar.

Tengo la sensación de haberlo hecho todo y no encuentro nada nuevo que me atraíga. Al menos nada que me haga reir a carcajadas.

Mi risa suena diferente, prácticamente sólo me sonrío.

Tampoco encuentro compañías que me agraden, ni me apetece quedar con las antiguas amistades o conocidos.

Me siento distante del pasado.

Estaré en el camino?
Me habré salido sin darme cuenta?
Qué señal me indica si lo estoy haciendo bien o mal?
Quizá mis dudas ya indican que algo no va bien?

Tengo ganas de divertirme, es cierto. De hacer algo que me haga sentir descansada y libre, pero no sé el qué.

Observo y nada me gusta.

Simplemente me dedico a hacer lo que tengo que hacer, a responder ante mis obligaciones y responsabilidades. Que ésto está muy bien, pero y el ocio dónde queda?

Tengo que sacar mi tiempo para atenderme, para cuidarme, para vaciarme, para relajarme, para divertirme.

Pero mi idea de diversión dista mucho de lo que he hecho hasta ahora, más que nada porque lo de siempre ya no me divierte.

Apatía total.

Debo vaciar la mente.

Tengo que buscar lo que me haga distraerme de la rutina actual.

Ando en mi búsqueda hacía lo desconocido.

Lo necesito porque no quiero sentir que me apago, no quiero tener la sensación de falta de tiempo, de cansancio, pero... qué será lo que necesito?

No hay comentarios:

Publicar un comentario